jueves, 7 de agosto de 2014

Una de pendientes

 
 
Cuando hay unos pendientes que ya no me gustan o me he cansado de ponérmelos, lo que hago es desmontarlos y guardar los abalorios. El otro día ordenando las cajas donde tengo todo almacenado, me di cuenta que ya no tenía espacio suficiente, así que comencé a montar pendientes, y con ayuda de mi cuñada, que se le dan muy bien las relaciones sociales de venta y marketing, yo reconozco que soy nula para eso, hemos vendido la mayoría. Habrá que hacer más cositas y aprovechar a mi nueva representante.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario